miércoles, julio 06, 2005

Crónica de una graduación anunciada (Parte 1)



Viernes primero de julio del año 2005... son cerca de las ocho de la mañana... me despierto a duras penas como si se tratara de un dia cualquiera... sin embargo caigo en cuenta de que es no es así...

Aunque me desperte despues de las ocho, en Anaco la lluvia no dejaba de caer desde temprano y por lo visto, el cielo no tenia intenciones de cambiar su tono gris, por lo que se auguruban unos imparables aguaceros.

Mi mama se notaba estresada, a pesar de que aun faltaban un poco más de siete horas para que se diera inicio a mi acto de graduación, pero aun quedaban cosas por hacer (y hacerse) en vista de lo importante del evento... La lluvia seguia cayendo, a veces suave, otras con tanta fuerza que pareciera capaz de penetrar el techo.

A causa de varias demoras, y aunado a que el agua no paraba de caer en las calles, la salida a Puerto La Cruz se pudo hacer luego de las 12 y 30 del mediodia. Mi hermano Gabo estaba al frente del volante, mientras que yo manipulaba el reproductor de Mp3's, aunque no a placer, puesto que sonaba un disco de mi hermano plagado de baladas pop y el ya fastidioso reggueton. Mi mamá no iba con nosotros... decidió quedarse para ponerse mas bonita e irse luego con una prima y su novio.



En el camino, el sueño me invadió por algunos minutos... realmente no había descansado lo suficiente desde el jueves, puesto que el día anterior (miercoles) había celebrado junto a algunos de mis compañeros la firma del acta de grado que nos acreditaba como licenciados en comunicación social... aunque no terminabamos de sentirnos asi, esperando porque se diera el acto protocolar.

Aunque íbamos a una velocidad prudencial debido a lo mojado del pavimento, logramos llegar a Barcelona justamente a las 2 de la tarde (el acto era a las 4, pero tenía que estar 2 horas antes en el hotel donde se llevaría a cabo), sin embargo, en ésta ciudad, como en Puerto La Cruz, no puede caer nada de agua, ya que el colapso es inevitable. Nuestro primer destino era un hotel ubicado en el centro protocruzano, donde se encontraban mi papá que vino de Maracay, junto a mi hermano menor Dani y mi tío Balmore, a quien considero junto al resto de mis primos el mas especial de todos.



Tio Balmore es el menor de mis tios por el lado paterno, y aunque no tiene familia propia, ve a sus sobrinos como sus hijos, dandonos un trato extremadamente especial. El prometió estar presente en cada una de las graduaciones nuestras, empezando el año pasado con mi prima Jhoa quien se graduó de odontóloga, a la que le siguió luego Marquierys (Tito, como le decimos de cariño) quien hoy ya es una licenciada en Administración. Lógicamente no podia faltar al mío, el mayor de los sobrinos menores (mi familia es muy numerosa y tengo primos que tienen hasta la edad de mi papá).

Bueno, volviendo a trajin de mi graduación, logramos llegar al hotel 40 minutos despues de pasar primero por Barcelona. Enseguida subi rápidamente a la habitación en donde se encontraban alojada mi familia, y apenas Dani me abrió la puerta, fui a pedir la respectiva bendición a papá y tío, quienes se encontraban esperandome con un vaso de whisky en sus respectivas manos. Al rato me desvesti con rapidéz y tome una ducha con suficiente agua caliente (la lluvia incesante habia vuelto frío el ambiente), para luego enfundarme en el trajecito nuevo que me había comprado en Maracay (bueno, mas bien el que me compraron, ya que no fui en persona por motivos laborales). Mientras me arreglaba, Dani se puso a tomarme fotos en pleno proceso con la nueva cámara digital de papá.



Puesta ya la respectiva pinta pre-licenciado, mi tío Balmore me llevo de inmediato al baño para acomodarme el cabello, alisandome los rizos con un peine y una secadora. Como 5 minutos le llevo hacerlo, mientras le decía "¿para que tío si me voy a poner el birrete y seguro eso estropea el trabajo?"... palabra cierta, pero en fin...

Luego de recibir tips de tío, de la forma como debía llevar la toga en mi brazo izquierdo, me despedí de el y de mi papá, para emprender la salida al Gran Hotel Puerto La Cruz, el cual quedaba a poca distancia de donde me encontraba. Mientras estabamos en la vía, Gabo me dio su nuevo teléfono celular para estrenar la camara filmadora integrada que trae (es el Nokia 6255). Lamentablemente no cuento con el cable de descarga y por ende no puedo mostrar en Internet dicho video que refleja la emoción del momento.



Logro llegar apenas a media hora antes de que arranque el acto y enseguida la gente de protocolo me lleva a un área del hotel en donde se encontraban tomandole fotografías a los graduandos. Luego de tomarme un par de gráficas, bajo nuevamente al lobby donde me sumo a mis compañeros, quienes ya se encontraban formados en una fila, listos a ingresar al recinto donde se llevaría a cabo el acto que cada uno de nosotros había estado esperando a lo largo de 5 años o más.

El cuento sigue... luego

Banda sonora: Rufio - Don't You Forget About Me (Simple Minds cover - Punk Goes 80's, 2005)

3 comentarios:

« Elisart » dijo...

Te apuesto a que si no dijeras de qué te estabas graduando, la gente lo adivinaría por la manera en que narraste todo. Que palabras usaste niño! Genial.
Mil felicitaciones y a triunfar se ha dicho.
Un abrazo!

Anónimo dijo...

Primera vez que entro a tu blog, pero me gustó como narraste todo; definitivamente es uno de los momentos màs emocionantes de la vida, la recompensa después de tanto esfuerzo. Espero la segunda parte. Saludos!

Anónimo dijo...

demasiado demasiado espectacular este relato!!! me encantó y lo disfruté, en julio también egresé de la Universidad del Zulia, como Arquitecto. y definitivamente, graduarse es lo más hermoso que hay en la vida (antes de tener hijos, claro está!!)
te felicito, y muchos exitos.
ignaciosanchez@cantv.net